Soy Ruby Gloom. La niña más feliz del mundo. Espero que no seas alérgico a los gatos negros. Y que no te asusten ni los fantasmas, ni los murciélagos, ni los seres de dos cabezas. Porque eso podría herir tus sentimientos. Mis amigos lo son todo para mí. Aquí somos como una familia cualquiera. Bueno, vale, con algún aspecto raro, tal vez.
Nos ponemos de los nervios mutuamente, invadimos el espacio del prójimo pero, a pesar de todo, nos queremos mucho. Todo va sobre ruedas. Podría decirse que me enfrento a los mismos problemas que cualquier otro niño, supongo. Sólo que mi mundo es un poquito peculiar, como lo son mis amigos.